La delegación de Fundación ANAR en Castilla y León ha asistido a la Jornada ‘Conociendo la salud mental- Cuidadosamente’, organizada este miércoles 19 de noviembre por la Conserjería de Familia e Igualdad de Oportunidades y la Plataforma de Organizaciones de Infancia de Castilla y León. El acto, celebrado en salón de actos de la Consejería de Agricultura y Ganadería de Valladolid, se enmarca en el Foro de Participación de la Infancia y la Adolescencia, además de conmemorar el Día Mundial de la Infancia (20N).
La vicepresidenta de la Junta de Castilla y León y Consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, ha inaugurado el evento, a través de un discurso donde ha puesto de relieve las cifras de las Líneas de Ayuda ANAR en Castilla y León, refiriéndose a las líneas de ayuda a la infancia, el teléfono de la familia y los centros escolares, y el servicio específico de ayuda en violencia de género, recalcando el incremento producido en los últimos 4 años con un 143% más de consultas.
La consejera ha transmitido a los menores de edad que integran el Foro la importancia que la salud mental tiene especialmente en estos momentos, siendo una de las mayores preocupaciones de la sociedad. De hecho, la jornada ha tenido como objetivo, trasladar las reflexiones sobre salud mental, con una formación previa, trabajada en dos sesiones con la delegación de ANAR en Castilla y León y con la guía de la técnico de apoyo y dinamización del Foro de POICyL.
Asimismo, los 20 niños, niñas y adolescentes que integran el Foro de Participación de la Infancia y la Adolescencia presentaron una guía de recursos de apoyo realizada por ellos mismos en la que, precisamente, se muestran, en lenguaje claro y sencillo, todos aquellos servicios dirigidos a ayudar emocionalmente a todos los/as menores de edad de Castilla y León, lo cual ha sido aplaudido por la vicepresidenta de la Junta. La guía ya está disponible en la web del Foro.
El evento, que contó con una mesa de diálogo y con la intervención de ‘Pausa y Reconecta’, que abordó el uso problemático de las pantallas, culminó con un espectáculo de la Escuela de Circo “Casa Escuelas Santiago Uno”, donde los integrantes, jóvenes, niños, niñas y adolescentes, trasladaron la ilusión de la magia, la energía de la música y el hipnotismo de los malabares.
