Nuestro objetivo es un mundo en el que todos los niños/as y adolescentes tengan derecho a que su voz sea escuchada sobre las situaciones de vida que les afecten, y siempre que se vulneren sus derechos
El Teléfono y Chat ANAR está formado por tres departamentos que trabajan coordinadamente para ofrecer la mejor orientación posible a los menores de edad:
Profesionales de la psicología expertos en materia de infancia y adolescencia.
Todas las peticiones de ayuda son atendidas por psicólogos/as que, dedicando a cada petición el tiempo que sea necesario, exploran, evalúan y orientan al menor para buscar una solución a su problema y remitiéndole al apoyo, siempre que esto es posible, de sus figuras de referencia.
Compuesto por trabajadores/as sociales con formación y especialización en infancia y adolescencia.
Hay determinadas situaciones en las que la solución de un problema determinado requiere que se active la red de recursos de infancia existentes en su municipio, en su autonomía o en cualquier lugar de España.
Dependiendo de la necesidad planteada, y utilizando nuestra guía de recursos, se inicia el contacto con los Servicios Sociales, Protección de Menores, Centros de Salud, Centros de Primera Acogida, otras ONG, etc.
Compuesto por licenciados/as en Derecho, con formación y especialización en infancia y adolescencia.
Asesora sobre las leyes y los derechos del niño/a y el adolescente, adaptándolos al lenguaje y la comprensión del menor de edad. Cuando hay un adulto dispuesto a ayudar al menor de edad, se le explican los pasos a seguir y las medidas legales a adoptar.
Cuando es necesario, actuamos directamente en estrecha colaboración con las autoridades competentes como Fiscalía de Menores, Policía y Guardia Civil.
Ante la llamada de un menor de edad, el equipo de profesionales de ANAR resolverá el caso según la situación planteada, en función de tres niveles:
Ofrecemos orientación psicológica y buscamos junto al menor de edad una solución a su problema, apoyándonos en su entorno y figuras de referencia (padres, abuelos, resto de la familia, profesores, etc.)
Si no es posible resolver el problema en el ámbito del menor y su familia, se orientará y derivará a los recursos sociales, educativos, sanitarios, policiales y/o jurídicos procedentes en cada caso.
Cuando nadie en su entorno puede ayudarle y existe una situación de riesgo o desamparo por abandono, maltrato, abuso sexual o cualquier otra situación de emergencia, trasladamos el caso a los organismos o autoridades competentes: servicio de protección, 112, cuerpos de fuerzas y seguridad, etc., haciendo posteriormente un seguimiento del caso.
El Teléfono ANAR ha desarrollado redes de colaboración con todas aquellas entidades públicas y privadas que garanticen que el menor de edad resuelva el problema que le afecta.
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